Quiero correr a tus brazos
cuando te veo venir,
y el viento impide nuestro encuentro
pero mi alma corre a ti.
Aun cuando las barreras invisibles se
opongan
impidiéndome llegar
me auxilio de las cuerdas que se han
hecho fuertes
al filo de nuestro amor.
Cuando veo tu sonrisa
escucho tus ideas, canto tus melodías.
Cuando dejas la sombra embriagada con
tu perfume
y el eco en mi memoria
del sonar de tus zapatos.
Pienso.
¡Que felicidad estar junto a ti!
No hay comentarios:
Publicar un comentario